¿Es de algún modo posible que esté quieto el cerebro, el cual reacciona en todo

instante y responde al más insignificante estímulo de acuerdo con su condicionamiento? Los tradicionalistas dicen que puede aquietarse mediante la adecuada respiración y la práctica de un estado de atención alerta. Esto envuelve otra vez la cuestión de “quién” es la entidad que controla, practica y moldea el cerebro. ¿No es el pensamiento, el que dice: “soy el observador y voy a controlar el cerebro y poner fin al pensamiento”? El pensamiento engendra al pensador.

Jiddu Krishnamurti . El vuelo del águila .

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