Al considerar la evolución en la Tierra, se ha dicho que la corriente de Mónadas

comienza primeramente a trabajar o laborar la masa total de materia que se encuentra en el llamado estado elemental cuando todo es gaseoso o ígneo; porque la antigua y verdadera teoría es que ninguna evolución es posible sin la Mónada como agente vivificador. En esta primera etapa no existe todavía lo animal, ni lo vegetal. Entonces aparece el mineral, cuando la masa completa endurece, siendo las Mónadas aprisionadas dentro de la misma. Luego, las primeras Mónadas emergen dentro de la forma vegetal, que ellas mismas construyen. El reino animal aún no ha aparecido. Después, la primera clase de Mónadas emerge del vegetal y produce el animal, luego el modelo humano, astral e indefinido, y ya entonces tenemos los minerales, los vegetales, los animales y los futuros hombres, pues la segunda y subsecuentes clases están aún desarrollándose en los reinos inferiores. Cuando llega la mitad de la Cuarta Ronda, no entran más Mónadas en el escenario humano, ni entrarán más hasta que una nueva masa planetaria, reencarnada de la nuestra, entre en manifestación. Este es el proceso completo superficialmente expuesto, excluyendo muchos detalles, ya que en una de las Rondas el hombre aparece antes que los animales. Pero este detalle no debe llevarnos a confusión alguna. Expresándolo en otras palabras, el plan aparece primeramente en la mente universl, después de lo cual el modelo o base astral es formado, y cuando ese modelo astral queda terminado, el proceso entero se repite con el fin de condensar la materia hasta la mitad de la Cuarta Ronda. Subsecuente a eso, lo cual será nuestro porvenir, la masa entera se espiritualiza, dotada de plena conciencia y todo el grupo de globos es elevado a un plano superior de desarrollo. En el proceso de condensación anteriormente citado, hay un cambio con respecto al momento de la aparición del hombre sobre el planeta. Pero con respecto a estos detalles, los Maestros sólo han dicho "que en la Segunda Ronda el plan varía, pero que la variación no se le dará a conocer a esta generación". Por lo tanto, a mí no me es posible darla, pero no hay ambigüedad sobre el hecho de que siete grandes razas tienen que desarrollarse aquí sobre este planeta y que la colección entera de las razas tiene que cursar siete veces alrededor de la serie completa de los siete globos.

William Judge . El Oceano de la Teosofia .

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