La luz es contemplación. Fijación sin contemplación es circulación sin luz. Eso es lo que

ha sucedido. Esa calamidad le ha sucedido al hatha yoga: fijan, concentran, pero se han olvidado de la luz. Se han olvidado completamente del huésped, tan solo siguen preparando la casa. Se han quedado tan absortos preparando la casa que se han olvidado del propósito para el que estaban preparando la casa, para quién. El hatha yogui prepara continuamente su cuerpo, purifica su cuerpo, hace posturas de yoga, ejercicios de circulación, y sigue haciéndolo, perpetuamente. Se ha olvidado por completo de para qué está haciéndolo. Y la luz está ahí, pero no deja que entre, porque la luz solo puede entrar cuando estás en un estado de dejarte ser completamente. Fijación sin contemplación es circulación sin luz.

Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .

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