El hombre mediano no es sino un centro de vibraciones siempre en movimiento: tan pronto

está inquieto, turbado por algunas preocupaciones, como deprimido; cuando desea alcanzar un objeto, le ocasiona un esfuerzo excesivo. Por una razón o por otra, así como por las cosas más sencillas, está sin necesidad alguna en constante estado de agitación. A una persona sensitiva le es difícil vivir en una gran ciudad, por la razón de que millares de seres se agitan sin razón por sentimientos y deseos frívolos de todas clases.

C. W. Leadbeater . El Pensamiento su Poder Y Su Empleo .

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