En la última noche, cuando Jesús estaba por partir y casi estaba establecido que al
día siguiente lo matarían, los discípulos le preguntaban: -En el Reino de Dios, estarás sentado a la derecha de Dios. ¿Dónde nos sentaremos nosotros? ¿Dónde? No estaban preocupados por Jesús, porque iba a morir al día siguiente; esto no los inquietaba. Lo que les preocupaba eran sus posicio-nes: doce apóstoles, ¿en qué orden jerárquico? Por supuesto, Jesús se sentaría a la derecha de Dios (hasta allí, podían tolerar), pero ¿quién es-taría al lado, quién después, y después...? La política no te abandona hasta el final. Esta mente es política, no religiosa. A la política le interesa saber quién eres en el orden jerárquico. A la religión no le preocupa quién eres; la religión no tiene jerarquías porque sólo entra a la religión quien se ha transformado en nadie. Entonces, ¿cómo podría existir una jerarquía? Sólo ingresa quien se ha dejado atrás a sí mismo.
Osho . El Dios de todos .