Mi enfoque es que tanto el sí como el no son absolutamente necesarios, forman parte
del ritmo interno. El hombre que no puede decir no tampoco puede decir sí; y si dice sí, su sí será impotente. Solo el hombre que puede decir «no» vitalmente puede decir «sí» vitalmente. Dependen el uno del otro, igual que la vida y la muerte dependen la una de la otra, igual que la oscuridad y la luz dependen la una de la otra, igual que el amor y el odio dependen el uno del otro. Ésta es la polaridad intrínseca de la vida.
Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .