Espera, no obstante. Porque si el «Sendero secreto» es inaccesible para ti en este «día»,

estará a tu alcance «mañana». No olvides que ningún esfuerzo, ni aun el más insignificante, así en buena como en mala dirección, puede desvanecerse del mundo de las causas. Ni aun el disipado humo queda sin huella. «Una palabra dura pronunciada en pasadas vidas, no es destruida, vuelve de nuevo». No nacerán rosas del pimentero, ni la argentina estrella del perfumado jazmín se convertirá en una espina o un cardo.

H.P. Blavatsky . La voz del silencio .

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