En el comedero de los pájaros había una docena o más de ellos piando, picoteando

los granos, pugnando, peleándose entre sí, y cuando llegó otro pájaro grande todos escaparon batiendo las alas. Cuando el pájaro grande volvió a irse, regresaron con su parloteo, riñendo, piando, haciendo una bulla tremenda. Pronto pasó cerca un gato, y hubo agitación, chillidos y un gran alboroto. Ahuyentaron al gato era uno de esos gatos salvajes, no un gato mimado; hay muchos de esos gatos salvajes alrededor de aquí, los hay de diferentes formas, tamaños y colores. En el comedero había pájaros durante todo el día, algunos pequeños, otros grandes, y después llegó una urraca regañando a todos, a todo el universo, y ahuyentó a los otros pájaros o más bien se fueron cuando la urraca llegó. Estaban todos muy alertas a causa de los gatos. Y cuando estuvo cercano el anochecer, todos los pájaros volaron y hubo silencio, quietud, paz. Los gatos iban y venían, pero ya no había pájaros.

Jiddu Krishnamurti . El Último Diario .

Índice