Lejos, pues, de lamentarnos por los obstáculos y la lentitud a que afortunadamente estamos condenados,
demos gracias a la providencia que nos proporciona la ocasión de recibir en condiciones ventajosas los frutos de la ley, cuando se haya cumplido el tiempo de esta ley. Démosle gracias porque nos proporciona la oportunidad de conseguir una situación o un medio de estar sufícientementepreparados para que, cuando llegue la hora del nacimiento del hombre nuevo, no se nos pueda aplicar a nosotros directamente lo que dijo Simeón en al nacimiento del reparador: este niño había nacido para ruina de muchos.
Louis-Claude de Saint Martin . El Hombre Nuevo .