El iniciando ha de vivir una vida sencilla y desprovista, por tanto, de todo lo
superfluo en propiedad y ocupación. Es un bello símbolo que encierra esta idea, el símbolo del nacimiento del Cristo en el humilde establo de Belén: es decir, la espiritualidad que solamente nace en la sencillez y la humildad. Por esto Jesús dijo tristemente a sus discípulos que "es más difícil que entre un rico en el Reino de los Cielos que un cable por el ojo de una aguja".
Eduardo Alfonso . La iniciación .