El hidrógeno y el oxígeno no le darán agua hoy y ácido prúsico mañana; el
fuego que le quema no le helara mañana. Si el agua puede ser hoy líquida y sólida mañana, es porque han cambiado las condiciones circunstanciales, y el regreso a las condiciones primitivas restablecerá el resultado originario. Cada nueva información respecto de las leyes de la naturaleza engendra un nuevo poder, porque todas las energías de la naturaleza se convierten en fuerzas utilizables en manos del hombre, a medida, que las comprende. Aquí tiene aplicación el proverbio: “Saber es poder”; pues el uso que puede hacerse de las fuerzas depende del conocimiento que de ellas se tenga. Escogiendo aquellas de que quiere servirse, equilibrándolas entre sí y neutralizando las energías que se oponen a sus designios. El sabio puede determinar de antemano el resultado y provocar la realización de los cálculos.
Annie Besant . La sabiduría antigua .