Si el hombre nuevo es depositario de tan grandes privilegios, ¿qué antor- cha seguirá para
comunicar sus frutos y para dar sus testimonios y signos a los que se los pidan? Se adherirá fielmente a la antorcha de la similitud y la analo- gía y, como tendrá la sensación íntima e invencible de la naturaleza espiritual de su ser y de la divinidad de la fuente de la que ha recibido todo lo que es y todo lo que posee, empezará por observar los interrogantes que nazcan en él.
Louis-Claude de Saint Martin . El Hombre Nuevo .