No os engañéis: nadie se burla de Dios; porque lo que el hombre haya

sembrado, eso, ni, más ni menos cosechará. Nuestra indolencia y nuestra avidez quisieran cosechar donde no sembramos; pero en el universo, en el mundo de la ley, La Buena Ley, misericordiosamente justa, da a cada uno el exacto salario de su trabajo.

Annie Besant . La sabiduría antigua .

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