Si la gente realmente hace el amor con alegría gritará, chillará, llorará, gemirá, se reirá.

Nunca se sabe qué tipo de emociones aparecerán, de modo que es mejor controlarse a uno mismo; si no, parecerás tonto. ¿Y qué pensarán los vecinos? Y las paredes modernas son tan finas que incluso tienes que hacer el amor en una postura de yoga, shavasana, la postura del cuerpo muerto, y acabar con ello cuanto antes, sin dejar que se vuelva algo orgásmico. «¿Qué estás haciendo? ¡Y Jesús sufrió por ti en la cruz! ¿Y tú gritas de alegría? ¡Piensa en Jesús, el pobre Jesús, y lo que pensará de ti! Y piensa en Dios, que es una especie de mirón que siempre está mirando por los ojos de las cerraduras... ¿Qué va a pensar de ti?».

Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .

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