«Señor, comencemos por inquirir por qué nos hemos convertido en esto que somos. Ciertamente, ello
nada tiene que ver con la vejez. ¿Es por el modo en que vivimos -el beber, el fumar, las drogas, el bullicio, la fatiga de la perpetua ocupación? Tanto exteriormente como interiormente, estamos siempre ocupados con algo. ¿Es la naturaleza misma del conocimiento la que contribuye a esto? Se nos adiestra para adquirir conocimientos -a través del colegio, de la universidad o en la acción de ejecutar algo hábilmente. ¿Es el conocimiento uno de los factores de esta falta de sutileza? Nuestros cerebros están llenos de muchísimas cosas, han reunido una gran cantidad de información proveniente de la televisión y de todos los diarios y revistas, y registran lo más que pueden; están todo el tiempo absorbiendo, reteniendo. ¿Es, pues, el conocimiento uno de los factores que destruye la sutileza de la mente? Pero no podemos desembarazarnos de nuestros conocimientos o dejarlos de lado; tenemos que poseerlos. Señor, usted necesita del conocimiento para manejar un automóvil, para escribir una carta, para realizar distintas gestiones; hasta tiene que poseer alguna clase de conocimiento para saber cómo empuñar una pala. Por supuesto que los necesita. Tenemos que poseer conocimientos en el mundo de la actividad cotidiana.
Jiddu Krishnamurti . El Último Diario .