Pocas personas pasan a la segunda fase. Es una fase natural. Los niños aman su
cuerpo. Si es un chico, ama un cuerpo de chico, su cuerpo. Dar el salto a un cuerpo de mujer, a un cuerpo de chica, sería un salto demasiado grande. Naturalmente, primero el chico se enamora de otros chicos. O si es una chica, el primer instinto natural es amar a otras chicas, porque tienen el mismo tipo de cuerpo, el mismo tipo de ser. Entiende mejor a las chicas que a los chicos. Los chicos son un mundo aparte. De manera que la fase homosexual es una fase natural. Pero entonces su sociedad vuelve a ayudar a la gente a quedarse estancada, porque crea barreras entre el hombre y la mujer, las chicas y los chicos. Si esas barreras no existen, entonces la fase homosexual no tarda en desvanecerse; empieza a aparecer el interés en la heterosexualidad, el otro sexo. Pero la sociedad no da oportunidades para eso: existe una gran muralla china entre el chico y la chica. En las escuelas se sientan aparte o tienen que ser educados separadamente, en las universidades tienen que vivir en hostales separados. No se acepta su encuentro, que estén juntos. Ése es uno de los problemas que nos está sucediendo a mi gente y a mí en esta ciudad supuestamente culta. Si esta ciudad es culta, entonces me pregunto ¿qué ciudad puede ser llamada inculta? El único problema para la gente de Puna es que mis sannyasins van juntos, hombre, mujer. ¡Debería ser un fenómeno natural! La gente debería sentirse feliz de que los hombres y la mujeres vayan juntos, creando una vibración de amor a su alrededor. Pero ellos nunca han ido juntos; se empiezan a sentir alterados, empiezan a sentirse celosos, empiezan a sentirse enfadados, porque ¿quiénes son estas personas para disfrutar lo que ellos no han podido? Si ésa no ha sido su alegría, tampoco permitirán que nadie más la tenga. Pero no lo dirán de esa manera: hablarán de grandes filosofías, ocultarán sus envidias detrás de grandes palabras de moralidad, de religión, de cultura... y no saben nada acerca de la moralidad o la religión o la cultura, porque toda cultura, toda religión, toda moralidad tiene que basarse en el amor. Si no se basa en el amor, no existe en absoluto. Es solo un juego, un juego falso que sigues jugando en la superficie, y en el fondo sigues siendo justo lo opuesto.
Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .