Ser sensual es estar asequible a los misterios de la vida. Vuélvete más y más
sensual, y desecha todas las condenas. Deja que tu cuerpo se vuelva simplemente una puerta. Todos tus sentidos deberían volverse puertas despejadas, sin ningún obstáculo, para que cuando oigas te vuelvas la música y cuando veas te vuelvas la luz y cuando toques te vuelvas lo que has tocado. Tanmaya, dices: «Le doy la bienvenida y disfruto esta sensibilidad creciente, un romance "orgásmico" con la vida. Solo me puedo imaginar a Dios descendiendo a mí como el amante supremo que me volverá del revés, totalmente abierta y tan leíble como la luna gloriosa.» Me has comprendido correctamente. Éste es mi mensaje en suma: Dios llega siempre como un amante. Dios es el Amado inmediato y supremo. Y si conoces a Dios de alguna otra manera, recuerda: ese Dios es una creación de tu mente, no es el verdadero Dios. Y como las religiones surgieron en torno a dioses falsos, no han sido capaces de ayudar a la humanidad a volverse más amorosa. Por el contrario, han llenado el mundo entero de odio, de violencia. La verdadera religión solo puede concebir a Dios como el Amado. Estás en el camino correcto. Tu pasado tirará de ti hacia atrás: los sacerdotes, los padres, los condicionamientos de tu mente, tirarán de ti hacía atrás. Ten cuidado. Desecha todo eso. Confía en esta sensibilidad creciente, esta apertura orgásmica. Ésta es la puerta a lo divino. Confía en ello y vete de cabeza con ello.
Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .