Has vivido con la idea de que «un día seré rico y entonces todo estará
bien». Ahora eres rico y nada ha cambiado; la desdicha interna continúa como siempre. De hecho, debido a las riquezas externas, en contraste a las riquezas externas, ves tu desdicha interna más claramente, más exactamente, más penetrantemente. La riqueza externa solo proporciona un fondo para sentir la pobreza interna: las posesiones externas hacen que te des cuenta de tu vacío interno. Por eso, no es sorprendente que los países ricos se vuelvan religiosos. India era religiosa cuando India era rica. En los tiempos de Buda, de Mahavira, India era opulenta; debido a esa opulencia, India era consciente de la pobreza interna. Y cuando tomas conciencia de la pobreza interna, empiezas a buscar hacia dentro. Cuando tomas conciencia de que nada externo puede satisfacer el anhelo interno —que todo lo que es externo permanece fuera, que no puedes llevarlo dentro—, cuando esto se vuelve una absoluta certeza, entonces empiezas una nueva búsqueda, una nueva aventura. Esa aventura es la religión.
Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .