Mirar la punta de la nariz solo sirve como comienzo de la concentración interna, para

llevar los ojos en la dirección correcta para mirar, y luego se mantienen como guía: después de eso, se pueden soltar. Esta es la manera en la que un albañil cuelga una plomada. En cuanto la ha colgado, guía su trabajo con ella sin molestarse continuamente en mirar la plomada.

Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .

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