Semejantes al sol que adentra simultáneamente sus rayos en gran número de habitaciones, estando iluminada

cada una según su total capacidad para recibirlo, esas grandes almas del mundo celeste bañan con sus rayos centenares de imágenes mentales de ellas, creadas por sus fieles discípulos. Estas imágenes están llenas de vida y animadas de la esencia misma del ser que representan, de suerte que cada estudiante tiene su maestro por instructor, sin poder monopolizarlo, sin embargo, en perjuicio de los demás.

Annie Besant . La sabiduría antigua .

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