Pero, cuando el hombre nuevo encuentre en sí alguna casa o algún pueblo que no

quiera recibirlo ni escuchar sus palabras, al salir de esta casa o de este pueblo sacudirá hasta el polvo de sus sandalias y este pueblo y esta casa serán más culpables que Sodoma y Gomorra, porque Sodoma y Gomorra no han oído más que una doctrina exterior que sólo se refería a sus sentidos corrupti- bles y, al despreciarla, ha hecho que caiga la cólera de Dios sobre sus cuerpos y sus moradas terrenales, mientras que el discípulo del que hablamos llevará a este pueblo y a esta casa la doctrina del hombre nuevo, que caerá en lo más profundo de los mismos cimientos de su ser y que, si llegase a ser desdeñada, debe atraerles las plagas más terribles y los castigos más dolorosos.

Louis-Claude de Saint Martin . El Hombre Nuevo .

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