Descubrirás también destellos de luz en esta triple inscripción en hebreo, griego y latín, porque

tiene bastante relación con el camino que ha querido seguir la verdad en la tierra. No en vano, estas tres lenguas eran conocidas y resultaban familiares en Jerusalén y no se hubiese escrito esta inscripción en las tres lenguas con la única finalidad de que las comprendiesen las tres naciones que las hablaban, si no hubiese tenido la sabiduría proyectos secretos para estas naciones, pues había también en Jerusalén otras naciones y otras lenguas, y estos proyectos secretos de la sabiduría se han explicado en parte a los ojos de los hombres menos perspicaces, cuando han podido ver la expulsión de los judíos y la llamada de los griegos y los romanos, imagen nueva de esta unidad que se sacrifica continuamente para la destrucción de la iniquidad y para la liberación de los desdichados que tienen su morada en las tinieblas. Pero, dejando esta investigación particular para la historia espiritual de los pueblos, en la que deben encontrarse también inmensos tesoros de inteligencia y de verdad, seguirás tus observaciones sobre el sacrificio del reparador.

Louis-Claude de Saint Martin . El Hombre Nuevo .

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