Uno no altera el lugar, sino que el lugar se altera a sí mismo. Por

eso insisto una y otra vez en que mis sannyasins no tienen que dejar el mundo. Deja que éste sea el criterio de tu iluminación: que el mundo tiene que cambiar por sí mismo cuando estés iluminado; tiene que cambiar. Y escapándote del mundo no estarás yendo a ninguna parte: vayas donde vayas, volverás a crear el mismo mundo, porque el molde para crearlo está dentro de ti. Puedes dejar a una mujer pensando que los problemas surgen debido a esta mujer: están los niños, y la casa, y las responsabilidades. Puedes dejar a esta mujer y a estos pobres niños y te puedes escapar; muchos lo han hecho a lo largo de los tiempos. Pero te habías enamorado de esta mujer; esa posibilidad de volver a enamorarte está dentro de ti. Te volverás a enamorar... de alguna otra mujer. Y tarde o temprano, y va a ser más temprano que tarde, surgirá otra familia, otro hombre, otra mujer, niños, responsabilidades. No puedes cambiar de vida tan fácilmente, de una manera tan barata. Solo cambias el contexto, pero en el fondo llevas el molde. El contexto lo creó el molde; el molde volverá a crearlo. Es como una semilla: destruyes el árbol pero llevas la semilla; cuando la semilla vuelva a caer a la tierra, volverá el árbol. Hay que quemar la semilla.

Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .

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