Lo nuevo hace que la gente se ponga muy aprensiva. Se aferra a lo viejo.
Por eso existen las personas convencionales en el mundo; y son un peso muerto. Debido a ellas el mundo permanece estático. Siguen insistiendo en sus viejos patrones. Por ejemplo, en India la gente ha vivido durante casi cinco mil años en la misma estructura que creó Manu. Puede que fuera buena en aquellos días; debió de haber tenido alguna significación. Pero han pasado cinco mil años y en India todavía existen los intocables. Hay personas a las que ni siquiera se puede tocar, no son seres humanos. La persona realmente ortodoxa ni siquiera tocará su sombra. Solía ser así, todavía es así en unos pocos pueblos: cuando un intocable, un sudra, pasa por la calle, tiene que gritar: «Por favor, apártate de mi camino. Estoy llegando», porque si su sombra cae sobre alguien de la casta elevada, eso será un delito. Le pueden apalear, ¡apalear hasta la muerte! Todavía se quema a gente por este delito. Y esta estructura estúpida ha vivido durante cinco mil años, ¡tan inhumana, tan poco democrática! Por eso parece que en India no puede triunfar la democracia: toda la mente hindú es antidemocrática. ¿Cómo vas a lograr crear un país democrático si toda la estructura de la mente, el condicionamiento de la mente, es antidemocrático?.
Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .