Si han comprendido la pregunta, verán entonces que lo importante es la percepción, el ver,
el observar. Si hay un intervalo entre percepción y acción, ese intervalo es tiempo. Cuando ustedes ven un peligro, algo que puede dañarlos físicamente, responden al instante, no piensan al respecto. No hay intervalo alguno entre percepción y acción, no hay un resquicio, hay respuesta inmediata y acción. Ahora bien, si vemos que un problema no puede ser resuelto desde el pasado, que en ninguna circunstancia puede uno responder plenamente, totalmente a este reto inmenso en términos del pasado, si vemos esto, la acción que emerge es completamente nueva. ¿Han comprendido? ¿Alcanzan a ver esa respuesta? ¿O sólo la ven intelectualmente, vale decir verbalmente? Si la ven verbalmente, la están viendo de una manera fragmentaria y, por lo tanto, no es una respuesta total. Pero si realmente ven el peligro del propio condicionamiento, de la cultura en que fueron educados, hay una acción inmediata de la libertad. Entonces la mente entiendo por mente la totalidad no fragmentada en absoluto como intelecto, cerebro, ambición, sentimiento, etcétera, sino lo total-, una mente semejante ve el peligro del nacionalismo, de este absurdo llamado religión. Ve que todas las que se titulan personas religiosas sólo repiten, en términos del pasado, con la imagen que tienen de Cristo o del Buda o de Krishna; ve que si uno actúa conforme al pasado, no sólo está incrementando la confusión, la desdicha, sino que está degenerando completamente. La degeneración se introduce apenas uno ve el peligro y no actúa.
Jiddu Krishnamurti . Encuentro Con la Vida .