El todo nunca coloca a nadie en un renunciamiento; nunca. El yo siempre te impulsa
a meterte en relaciones porque, corno nadie nace solo, nadie puede estarlo. Por lo menos, se necesitará a la madre, al padre; una sociedad, una familia. El todo siempre te empuja hacia las relaciones. Por eso digo que el renunciamiento va contra Dios.H.
Osho . El Dios de todos .