Tu «Isla» es el ciervo, tus pensamientos los galgos que le fatigan y

acosan en su carrera hacia la corriente de Vida. ¡Ay del ciervo que es alcanzado por los demonios ladradores antes de llegar al valle del Refugio -Dhyân Mârga- llamado «sendero» del Conocimiento puro!».

H.P. Blavatsky . La voz del silencio .

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