De manera que en mi comuna no se evita nada. Las ambiciones se permiten, se

aceptan, como parte de los seres humanos: su ignorancia, su inconsciencia. Pero hago que mi gente tome consciencia de que eso son juegos, así que juégalos pero juégalos conscientemente, ponte cada vez más alerta y nunca dejes que se vuelvan serios. Si no se vuelven serios, no es necesario tenerles miedo. El problema es que, cuando un juego se vuelve muy serio, te olvidas completamente de que es un juego.

Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .

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