El elemento femenino está en mayoría. Estas almas, ligadas a la tierra, tienen por lo

general escasa inteligencia, y sus comunicaciones no revisten otro interés, para el que ya está convencido de la existencia del alma después de la muerte, que el que tendría su conversación en la tierra. Además, como aquí abajo, esos desgraciados son tanto más afirmativos cuanto más ignorantes e imponen a sus fieles, como última concepción del mundo invisible, el conocimiento limitado que ellos mismos tienen.

Annie Besant . La sabiduría antigua .

Índice