¿Por qué detestamos al pobre? ¿Detesta usted realmente al pobre? Yo no lo estoy condenando,
sólo le pregunto si realmente detesta al pobre. Y si lo hace, ¿por qué? ¿Es porque usted mismo también puede ser pobre un día, e imaginando su propia situación la rechaza? ¿O es que le desagrada la sórdida, sucia, desarreglada existencia del pobre? Por desagradarle el desaseo, el desorden, la escualidez, la inmundicia, usted dice: “No quiero tener nada que ver con el pobre”. ¿Es eso? Pero, ¿quién ha creado el desorden, la pobreza, la escualidez en el mundo? Usted, sus padres, su gobierno toda nuestra sociedad las ha creado; porque ya lo ve, no hay amor en nuestros corazones. No amamos ni a nuestros hijos ni a nuestro prójimo, no amamos ni a los vivos ni a los muertos. No sentimos amor por nada en absoluto. Los políticos no van a erradicar toda esta miseria y fealdad que hay en el mundo, ni lo harán tampoco las religiones y los reformadores, porque sólo se interesan en un pequeño remiendo aquí y allá; pero si hubiera amor, entonces todas esas cosas horribles desaparecerían mañana mismo. ¿Ama usted algo? ¿Sabe lo que es amar? Le diré, cuando uno ama algo completamente, con todo su ser, ese amor no es sentimental, no es un deber, no está dividido como amor físico o amor divino. ¿Ama usted algo o a alguien con todo su ser a sus padres, o a un amigo, o a su perro, o un árbol? ¿Sí? Me temo que no. Por eso es que en su ser tiene usted vastos espacios en los que hay fealdad, odio, envidia. Vea, el hombre que ama no tiene lugar para ninguna otra cosa. Nosotros tendríamos que emplear realmente nuestro tiempo discutiendo todo esto y tratando de descubrir cómo eliminar las cosas que, al obstruir de tal modo nuestras mentes, nos impiden amar; porque es sólo cuando amamos que podemos ser libres y dichosos. Sólo las personas que aman, que son vitales, felices, pueden crear un mundo nuevo no los políticos, no los reformadores o unos cuantos santos ideológicos.
Jiddu Krishnamurti . El Proposito de la Educacion .