Mientras tanto, una acción independiente de él trabaja para proveerle de un cuerpo físico adecuado

a la expresión de sus cualidades. Los lazos que formó y las deudas que contrajo con otros seres humanos en pasadas vidas, contribuirán a determinar el lugar de su nacimiento y su familia. ¿Fue origen de dicha o de desgracia para otros? ; Esto será un factor que determine las condiciones de su futura vida. ¿Su naturaleza de deseos estuvo disciplinada o irregular y sin freno?: esto se tendrá en cuenta para la herencia física del nuevo cuerpo. ¿Cultivó ciertos poderes mentales, tales como el artístico?: en este punto también la herencia es un factor importante, pues requiere delicadeza en al organización nerviosa y en la sensibilidad táctil; y así sucesivamente en variedad sin fin. El hombre puede que tenga en sí, y tendrá seguramente, muchas cualidades características incongruentes, de modo que sólo algunas hallen expresión en un solo cuerpo, y así se elegirá una parte de sus poderes adecuada a una expresión simultánea. Todo esto lo hacen ciertas poderosas Inteligencias espirituales, llamadas generalmente los Señores del Karma, porque su función es inspeccionar los efectos de las causas que constantemente ponen en acción los pensamientos, deseos y actos. Tienen en sus manos los hilos del destino que cada hombre tejió, y guían al que ese reencarna hacia el ambiente determinado por su pasado, y que inconscientemente escogió en sus vidas anteriores.

Annie Besant . La sabiduría antigua .

Índice