Las influencias de la región inferior están lejos de tener una propiedad semejante. Lo único
que se levanta así de la región inferior es la influencia corrompida y lo hace por nuestra falta de cuidado, más que por una orden recibida de arriba, que algunas veces envían para probarnos. Sólo se nos presenta bajo formas irregulares y colores monstruosos. Ni siquiera se mantienen las formas que toma y no hacen más que deformarse continuamente, porque no tiene el principio de las formas regulares y se manifiesta como por sorpresa y como aprovechando algún resquicio que hayamos dejado abierto. Suele hacerlo más durante la oración que en otras ocasiones, porque entonces abrimos más puertas que en otras ocasiones y, sin embargo, no ponemos más atención que en condiciones normales ni la precaución de poner centinelas en todas las puertas que abrimos.
Louis-Claude de Saint Martin . El Hombre Nuevo .