Nace un niño; el niño está indefenso. Este es el primer sentimiento que todos llevan

consigo. Nace el niño, está indefenso, y un niño indefenso quiere poder. Eso es natural porque todo el mundo es más poderoso que él. La madre es poderosa, el padre es poderoso, los hermanos son poderosos, todo el mundo es poderoso, y el niño está absolutamente indefenso. Desde luego, el primer deseo que aparece es el de tener poder, cómo crecer fuerte, cómo ser dominante. Y el niño empieza a comportarse de forma política desde ese mismo instante. Empieza a aprender trucos, a cómo dominar.

Osho . Yoga: La Ciencia Del Alma Vol 1 .

Índice