La Cábala como transmisión (o si se quiere como corriente sagrada de pensamiento) se desarrolla,
o mejor, se manifiesta a lo largo del tiempo, no en su esencia metafísica, en la realidad original que ella está destinada a transmitir, sino en las adaptaciones y posibilidades de explicitación que lleva en sí misma, las que cumplen la función de rescatar al mundo, al iluminarlo en la Unidad. Así cuando Isaac Luria, exponente de la llamada "Cábala de Safed" expresa su enseñanza de la "rotura de los vasos" no está añadiendo nada; como el taoísta, o el arcaico, el cabalista sabe que todo está en todo, sin perjuicio de que, como ocurre con la estructura de todo lenguaje, el significado de sus elementos sea válido por la correspondencia precisa con la inteligencia del pensamiento que en él se expresa. Por otra parte si bien la Cábala es propiamente el esoterismo de la tradición hebrea, es expresión de una Tradición Unánime, Tradición Universal de la que las tradiciones particulares son formas, en el sentido de que su depósito central, su realidad esencial, es una, lo cual puede observarse en los símbolos fundamentales que se hallan presentes por doquier y en todas las tradiciones.
Jose Manuel Rio . ACERCAMIENTO A LA CABALA: Sobre el Arbol de la Vida Sefirótico .