EOS / LA AURORA: precedía el nacimiento del día pues era la mensajera del Sol.

A menudo se la representaba de forma similar a APOLO, montada sobre un carro con cuatro caballos blancos. Eos utilizaba sus rosados dedos para abrir las puertas de oriente, esparcir el rocío entre las hojas o hacer florecer las plantas. Morfeo, dios del sueño y las demás diosas de la noche huían ante su presencia. Eos se enamoró de Titón, hijo de Laomedón y hermano de Príamo, y pidió a ZEUS que se le concediese la inmortalidad pero se olvidó de solicitar también que Titón no envejeciera jamás. Así, con el paso del tiempo Titón se convirtió en un anciano decrépito que llegó a necesitar cuidados de bebé durmiendo en una cuna, de tal modo que prefería morir. Terminó siendo convertido en un saltamontes.

Mitología Griega .

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