Habrá en ti un hombre natural, dirigido por su simple razón, que condenará todas las

injusticias que tus enemigos interiores dirigirán contra ti. Hasta tratará, como Pilatos, de no prestarse a la ira de tus adversarios y persuadirlos de que te acusan y te condenan injustamente y sin razón; pero te verás obliga- do a reducir al silencio incluso a este hombre, porque en esos momentos debe reinar el poder de las tinieblas para que pueda cumplirse tu sacrificio. Es el momento en que debe manifestarse la dedicación pacífica del hombre nuevo y entonces es cuando debe sentir cuánto le ha costado él a la verdad suprema, cuando se ha visto ultrajada por el hombre prevaricador, y reconocerá que es necesario que él sufra una injusticia de la misma índole que la que se cometió con la caída.

Louis-Claude de Saint Martin . El Hombre Nuevo .

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