Verá con qué arte evitan los hombres los peligros naturales que los amena- zan, con
qué sabiduría eluden los males que su experiencia les ha enseñado a prever, con qué inteligencia saben poner en combate a los elementos y enfren- tar a unos con otros para protegerse de los estragos que podrían producirles estos elementos, si los dejasen en manos de la fuerza oculta e impetuosa que los empuja continuamente a los desórdenes. Ve que el hombre dispone de estos elementos y tiene poder sobre ellos para moderar a su gusto el fuego con el agua; el frío, con el calor; la sequedad, con la humedad, y es capaz de alterar las propiedades de su entorno, mediante la aplicación de substancias diversas que ha puesto la naturaleza en su mano con una abundancia pródiga.
Louis-Claude de Saint Martin . El Hombre Nuevo .