Esta piedra angular es en realidad la raíz de esas siete fuentes sacramenta- les que
descubre el hombre nuevo en si cuando ha sufrido las pruebas prepara tonas e indispensables, al ser en ella donde ha descubierto a este instructor divino del que hemos hablado antes y que, sentado en la cátedra anterior a todas las cátedras temporales, ha pronunciado ante él, en la verdadera monta- ña, los sermones y las instrucciones que deben servir de guía y de norma al pueblo de Israel, si quiere mantenerse con los privilegios de su elección.
Louis-Claude de Saint Martin . El Hombre Nuevo .