Va a responsabilizarse de cuidar de la subsistencia del pueblo, así como de

su seguridad y su defensa, y, cuando vea que su pueblo se da a la incredulidad, invocará al Eterno y hará, en su poderoso nombre, que mane agua de la roca ante los ojos de los incrédulos.

Louis-Claude de Saint Martin . El Hombre Nuevo .

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