Una forma-pensamiento puede compararse a una botella Leyden cargada de electricidad. La botella representa la
materia de los planos mental y astral, formando su cuerpo; y la carga de electricidad, a la vibración del pensamiento, que es el alma de esta forma. Si el ser hacia el cual va dirigida se encuentra en un estado pasivo, y si tiene en sí vibraciones de la misma especie, y por consiguiente en armonía con ella, la forma de pensamiento se descargará en seguida sobre él e intensificará sus vibraciones; si no hay en él vibraciones sincrónicas las despertará.
C. W. Leadbeater . El Pensamiento su Poder Y Su Empleo .