La sexualidad puede utilizarse como una gran fuente de energía, acceder con ella a las
puertas mismas de Dios, pero si la reprimes te enredarás cada vez más. Si reprimes la sexualidad, se desatará la ira; toda la energía que iba a convertirse en sexualidad se transformará en ira. Y más vale entregarse al sexo que a la ira. En el sexo, al menos hay algo de amor, mientras que en la ira hay violencia pura y nada más.
Osho . El libro del ego .