¿Hay una experiencia nueva en la meditación? El deseo de experiencia, de una experiencia más
elevada que esté más allá de lo cotidiano o lo vulgar, es lo que mantiene vacía la fuente. El anhelo de más experiencias, de visiones, de una percepción superior, de una realización u otra, hace que la mente mire hacia afuera, lo cual no difiere de su dependencia del medio y de la gente. Lo curioso de la meditación es que un acontecimiento no se convierte en una experiencia. Está ahí, como una nueva estrella en los cielos, sin que la memoria se apodere de él y lo retenga, sin el habitual proceso de reconocimiento y respuesta en términos de agrado y desagrado. Nuestra búsqueda se dirige siempre a lo externo; la mente que busca cualquier experiencia se está moviendo en lo externo. El movimiento hacia lo interno no es búsqueda en absoluto, es percepción. La respuesta es siempre repetitiva, porque siempre procede del mismo banco de memoria.
Jiddu Krishnamurti . Encuentro Con la Vida .