Así habla el Sabio: ¿Te abstendrás de la acción? No es así como alcanzará tu

alma su libertad. Para llegar al Nirvana, debe uno conseguir el conocimiento de Sí mismo; y el conocimiento de Sí mismo es hijo de las buenas obras. Ten paciencia, candidato, como aquel que no teme ningún fracaso, ni acaricia triunfo alguno. Fija la mirada de tu alma en la estrella cuyo rayo eres tú, en la estrella flamígera que resplandece en los tenebrosos abismos del eterno Ser, en las regiones sin límites de lo Desconocido.

H.P. Blavatsky . La voz del silencio .

Índice