Y dijo: «Si no hubieras estado aquí, me habría perdido también mi muerte, igual que
me he perdido mi vida. Pero estoy muriendo conscientemente. Al menos estoy contento con una cosa: no estoy muriéndome inconscientemente.» Y su muerte fue hermosa. Murió sin ningún pesar, murió de una manera relajada. Su corazón casi le dio la bienvenida a la muerte. Murió lleno de gratitud. Murió piadosamente. Su próxima vida tendrá una cualidad diferente.
Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .