Estas regiones corresponden en la conciencia humana a las mismas divisiones de la inteligencia, como
se verá más claramente luego. Quizás se podría expresar mejor semejante distinción diciendo que, en las cuatro subdivisiones inferiores, las vibraciones de la conciencia dan origen a formas, imágenes o representaciones, apareciendo cada pensamiento como una forma viva; mientras que en las tres subdivisiones superiores, aunque la conciencia también produce vibraciones, parece más bien emitirlas como una ola poderosa de energía viva que no se incorpora en imágenes distintas mientras está en esa región superior, sino que engendra formas múltiples, ligadas entre sí por una condición común, desde que penetra en los mundos inferiores.
Annie Besant . La sabiduría antigua .