Puede que, sentados aquí, ahora no tengamos miedo de nada. Pero, obviamente, en nuestra conciencia

hay miedo. En el inconsciente, o en el consciente, se encuentra esta terrible cosa llamada ansiedad, pena, angustia, sufrimiento y miedo. Podemos estar psicológicamente atemorizados del mañana, de lo que podría ocurrir o de lo que podríamos no llegar a obtener. Esa relación que nos ha proporcionado un gran placer, un gran consuelo, ¿continuará, será permanente? ¿O habrá un cambio?, lo cual atemoriza a la mente, porque la mente, el cerebro, necesita estabilidad, necesita seguridad para poder funcionar. Por favor sigan esto. El cerebro creará cualquier conclusión que le dé seguridad. Puede ser una conclusión racional o irracional, una creencia tonta o una observación inteligente. El cerebro se aferrará a estas conclusiones porque actúan brindándole una completa sensación de seguridad. Hay, pues, temores tanto conscientes como inconscientes, temores que están ocultos en los escondrijos de la propia mente y que jamás han sido explorados y descubiertos. El miedo, como el dolor, es una nube oscura que distorsiona cualquier acción. Engendra desesperación, cinismo o esperanza, todas manifestaciones irracionales. Y el miedo es el movimiento del pensar, que es tiempo y, por lo tanto, es real, no es algo imaginario. Nuestro problema, entonces, es cómo una mente, nuestra mente, ha de sacar a la luz este miedo que se halla tan profundamente oculto. ¿Hay alguna manera de sacarlo a la luz? ¿O está siempre ahí, mostrando ocasionalmente su cabeza cuando tiene lugar una crisis o algún incidente, cuando se nos presenta un reto? ¿O puede hacerse que este miedo se manifieste en su totalidad? Hemos dicho que el análisis es un proceso de fragmentación. Cuando la mente se da cuenta de que tiene que haber una libertad total con respecto al miedo, ¿qué es lo que ha de hacer un ser humano? ¿Esperaremos una insinuación, indicios del inconsciente a través de los sueños, nos tomaremos tiempo analizándonos? Si descartamos todo eso, no en teoría sino que de hecho lo descartamos porque no tiene sentido, entonces, ¿qué es la totalidad, la estructura completa del miedo? Si la mente puede mirar y comprender la totalidad del miedo, entonces el inconsciente tiene muy poca importancia, entonces lo mayor arrastra con su fuerza a lo menor. ¿Acaso no lo ven? Aguarden un momento. Por favor, sigan esto. El pensamiento ha creado el micrófono, pero el micrófono es independiente del pensamiento que lo ha creado, ¿no es así? La montaña no ha sido creada por el pensamiento, es independiente del pensamiento. El miedo es producido por el pensamiento. ¿Es ese pensamiento independiente del miedo? ¿Es el miedo independiente del pensamiento, aunque el miedo hubiera creado el pensamiento? Si es independiente del pensamiento, como la montaña, entonces ese miedo no fabricado por el pensamiento seguirá viviendo. Si está fabricado por el pensamiento, como el micrófono, entonces existe una percepción de todo el miedo como movimiento del pensar. ¿Esto les comunica algo?.

Jiddu Krishnamurti . Encuentro Con la Vida .

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