¿Podría haber un peligro de desorden mental mayor que el que hay en la mentalidad

en que estamos viviendo ahora? ¿No estamos todos, si me perdonáis que lo señale, un poquito desequilibrados mentalmente? No estoy siendo rudo; no es mi intención o pensamiento el juzgaros. Pero existe esta extraordinaria preocupación sobre el peligro acrecentado de enfermedad mental. ¿Sabéis qué es lo que nos hace enfermar? No es la investigación sobre el temor. Las guerras, el comunismo, el fanatismo religioso, la ambición, la competencia, el esnobismo, estas cosas son los indicios de una persona mentalmente enferma. Ciertamente, la indagación sobre el temor y el liberar de él por completo a la mente es de la más alta cordura. La pregunta indica ¿no es así, señores? que creemos que la actual sociedad es una cosa maravillosa. Probablemente aquellos de entre nosotros que tengan una buena cuenta bancaria y estén cómodos, creerán que las cosas van muy bien, y no querrán que se les moleste. Pero la vida es una cosa muy perturbadora, algo muy destructivo; y es de eso que tenemos miedo. No estamos interesados en el vivir, en estar libres de miedo; sino que queremos encontrar un rincón donde estemos seguros y cómodos, y que se nos deje en paz para vegetar. Señor, esto no es retórica; ese es nuestro deseo intimo, secreto. Buscamos esta seguridad en todas las relaciones. ¡Qué celos y que envidia hay en las relaciones! ¡Qué odio cuando la esposa se separa del marido, o el marido se va con otra! ¡Cómo buscamos la aprobación de la sociedad y la bendición de la iglesia! Por cierto, son todas estas muchas cosas las que traen deterioro, la destrucción de la cordura.

Jiddu Krishnamurti . El Estado Creativo de la Mente .

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