Tiembla. Herodes. Tu trono está amenazado. Acaba de nacer un rey de los judíos. Los
pastores han oido a los ángeles que cantaban el nacimiento de este hijo del hombre; los magos han visto su estrella en Oriente y vienen a visitarlo y ofrecerle su oro y su incienso. Por más que extermines a los hijos de Raquel para tranquilizar tus temores, este hijo es un niño que no se extermina por la mano del hombre, ya que no ha nacido de la voluntad de la carne ni de la voluntad del hombre ni de la voluntad de la sangre, sino que ha nacido de Dios. Por tanto, el Dios que lo ha formado sabrá vigilar sus días y hará que se refugie en Egipto, hasta que haya pasado el tiempo de tu furia y haya llegado el momento de la gloria de su hijo.
Louis-Claude de Saint Martin . El Hombre Nuevo .