Recuerda a Moisés. Cuando estuvo cara a cara con Dios, cuando vio a Dios en
las montañas como fuego que salía de un arbusto verde, y el arbusto no ardía, el arbusto estaba tan fresco, tan verde como siempre..., se quedó pasmado. No daba crédito a sus ojos. Era imposible..., ¡semejante fuego! El arbusto estaba en llamas y, sin embargo, el arbusto no ardía. Y entonces oyó que llegaba a él una voz del arbusto: «Moisés, quítate los zapatos, porque estás en terreno sagrado.».
Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .