A medida que evoluciona y se desarrolla el ser humano, se observan dos etapas: la
primitiva o etapa atómica, en la cual el hombre sólo se interesa por sí mismo y su propia esfera de actividad, donde la autocentralización es la ley de su ser. Es una etapa de la evolución necesariamente protec¬tora. El hombre puramente egoísta se ocupa principalmente de sus cosas. En una etapa posterior, la conciencia del hom¬bre comienza a expandirse, su interés trasciende la esfera personal y llega un período en que tantea en busca del grupo al cual pertenece. Esta etapa corresponde a la de radiactividad. Desde ese momento el hombre ya no es sólo una vida exclusivamente autocentrada, sino que empieza a afectar definitivamente su medio ambiente, aparta la aten¬ción de su propia vida personal egoísta y busca su centro superior. De un simple átomo que es, se convierte en un electrón y queda bajo la influencia de la gran Vida central, la cual lo sujeta dentro de su esfera de influencia.
Alice A. Bailey . La Conciencia del Átomo .